jueves, 23 de octubre de 2008

Ya esta bien de mojigaterias............
Quiero hacer el amor, tener un amante que me haga vibrar y temblar de placer.
Quiero volver a sentir ese deseo implacable que me desata, me vuelve loca,no me deja pensar...
Quiero hacer el amor con un hombre que sepa hacerlo de verdad, y si no existe, me conformare con que me sepa follar........

domingo, 19 de octubre de 2008

Que lío....
Tengo una cita con un hombre al que le tengo un aprecio muy sincero.Aprecio...que palabra más extraña.
Hasta ayer tenía bastante claro que acudiría a esa cita, aún a sabiendas de que este hombre espera de mí mucho más de lo que yo espero de el, pero bueno, eso esta hablado y las cartas puestas sobre la mesa, no me preocupa.
Mi preocupación es otra. Volví a ver a ese tipo que me quitaba el sueño hace meses y me hizo volver atrás en el tiempo. Mi sensación es la misma, no sé si me gusta pero si, que me atrae como un imán.
Creo (había escrito, "sé" pero me resulta prepotente por mi parte) que sí le propusiera una cita acudiría sin reparos, y pensarlo me produce un extraño placer que no me provoca en absoluto la cita que tengo pendiente.
Me descoloca, me desconcierta y me exita como nadie ha sabido nunca y no sé el por que...

domingo, 12 de octubre de 2008

-¿Me quieres?, me pregunta mirándome fijamente.....
-Claro, algo te tendré que querer, ya sabes que el roce hace el cariño, le respondo quitándole importancia a una pregunta que, sinceramente dejo de tener sentido responder hace mucho, mucho tiempo.
-Dímelo...
-Si pudiera, si lo sintiera te lo diría- le digo devolviéndole una mirada intensamente fría, para que vea en ella la convicción de mis palabras- pero es inútil, no te quiero como hombre y lo sabes, no estoy enamorada de ti.
-No te entiendo, haces y deshaces a tu antojo, vas y vienes sin que te ponga reparos, no te pido nada que no quieras darme, no se ya que hacer.....
-Ese fue el principio de nuestro fin, que nuca supiste que hacer y yo me canse de arrastrarte, de tirar de ti. Ya no me quedan motivos ni ganas, se agotaron mis fuerzas esperando un milagro que ya se hizo caduco.
-¿Pero que quieres, dime que quieres?
-(Media sonrisa aparece en mi cara) ¿De verdad quieres saberlo?
-Si
-Muy bien, te lo voy a decir. Quiero un amigo, un compañero, un complice, un confidente y un amante. Quiero todo lo que una vez creí que tenias, y que se perdio cuando descubri lo que realmente querías.
Amigos ya crees que tienes, compañeros también, complices... de nada, ¿confidente?, imposible, solo te escuchas a ti mismo si es que escuchas algo que no venga de la tv, y como amante...solo te amas a ti mismo.
-Me voy a dormir. ¿Te vienes?
-Buenas noches, no, no tengo sueño.

No tengo te tengo en mis sueños debería haberle dicho. Aunque dudo que nada de lo que pudiera decirle le afectara en lo más mínimo por lo rápido que coje el sueño, y eso es lo preocupante, mientras durmamos bajo el mismo techo mi desvelo esta tan asegurado como sus ronquidos.

lunes, 29 de septiembre de 2008

Trato de recordar el tiempo que me llevó a una entrañable relación con aquel hombre.

Mi vida era bastante caótica cuando le conocí. Al principio no me gustaba, tenia una especie de falsa elegancia que me encojia el corazón. Se veía en él la huella que otras personas, y su propia historia le había dejado. Después terminó por interesarme , imaginaba su vida e incluso a veces de alguna manera la compartimos. Era ese amigo con quien nadie puede enfadarse, entre otras cosas, porque no le conocía.
Me decía que se acercaba a mi,por la misma razón que lo hacia yo, para terminar un poco mas alegre sus días, o para hacer descansar sus sueños y sus insomnios en una cama quizás menos vacía. Pensaba que tenia sus aspiraciones, sus virtudes, sus vicios, sus miedos y sus miserias igual que yo tenia las mías.

Cuando conoci a ese hombre y comenzamos a compartir estos rincones, el lugar se llenó de él, se borró toda señal de cualquier otro inquilino.

Entro en mi vida como una ráfaga de aire fresco y sereno, me aisló del desasosiego y sin sentido en el que estaba viviendo, y comenzó a enseñarme como rodearme de las cosas. Pero yo no supe devolverle todo lo que me ofrecía.

Dicen que las alegrías, cuando se comparten, se agrandan y que en cambio con las penas pasa al revés, se achican. Tal vez lo que sucede es que al compartir, lo que se dilata es el corazón. Su corazón era tan grande que achicó todas mis penas. El hizo más noble mi propio corazón, me hizo mejor persona.

Si tuviera que resumir esa relación yo diría que fue mi silencio y su ruido.A veces con las mismas reacciones, el afán por descubrir o por inventar remedios para solucionar los problemas del mundo, de nuestro mundo

Ávidos como niños curiosos, extravagantes, corríamos debajo de la lluvia, le gustaba dejarse acariciar por las gotas de agua. El cansancio nos cortaba el aliento, y los golpes de agua nos calaban.

Otras veces nos gustaba dar paseos por caminos que no llevaban a ninguna parte.El me conducía y yo me dejaba llevar tranquila a su lado. A veces nos callábamos juntos. Luego con voz dulce, un poco velada me interrogaba suavemente sobre mi vida.

Al principio tenía miedo, miedo de enamorarme. Después ya no lo tuve. Cuando los sentimientos no se pueden controlar de nada sirve tener miedo. El miedo es precaución y llegó un momento en que la precaución dejó de tener sentido.

Poco a poco comencé a descubrir que junto a el tenia sensaciones que casi había olvidado o quizás nunca había conocido.Recuerdo sus esfuerzos por tranquilizarme, consolarme por algo que ni siquiera el mismo sabía. En esos instantes solo quería huir, marcharme , alejarme del final de esos días, pero no sabia, no podía...

Le veía ordenar mis desastres, y aunque solo fuese un centímetro todo el lugar recobraba un equilibrio egoistamente perfecto para mi .Con su voz seductora entretejía una dulce y cordial conversación para olvidar el ultimo percance y yo le respondía con mis palabras mas hermosas, que le provocaban su característica risa de tres notas.

Practicaba hacia el una especie de devoción ante la que como hombre no podía ser ajeno. Me gustaba su amor a la vida, su fantasía, su punto de locura, había un autentico creador en el ( aunque quizás nunca lo supo).
Con el tiempo terminó sucediendo lo que se anunciaba, en mis defectos y en sus virtudes. Esa relación me recordaba las vísperas de un examen, en el que sabia que no sabia nada, que me iban a suspender. Es como si al estar, apostara por perderle y esa apuesta sabia que la ganaría.Sin embargo durante ese tiempo, por primera vez sentía que mi corazón y mi cabeza iban de acuerdo.

Cada vez que me sentaba a su lado y uníamos las manos con una confidencia, o cuando acariciaba su pelo y jugaba con él entre mis dedos, se me llenaba el corazón de nostalgia y emoción,y porqué no decirlo, también de amor, de un extraño y profundo amor.

Una noche deslizó su pierna entre las mías y me arrastró a una especie de lambada atrevida y sensual.Yo me dejé abrazar, me uní a su cuerpo y a sus ideas. Con la cabeza echada atrás y los ojos entrecerrados tuve la sensación de ser feliz, y lo fui hasta que otra noche de tantas, de repente, entre las pestañas tropecé con su mirada, su sonrisa había cambiado, esa ternura de sus gestos ya no la encontraba.

Comencé a tener cien pruebas de su indiferencia. La magia se había perdido,se esfumo igual que llegó, no quedaba nada cero..

Cuando se fue yo no le reproche nada, no tenía nada que reprochar, me propuse irme también y no volverle a molestar.
Pasé aquel ultimo día frente a mi ventana pensándolo, imaginandolo como en tantas otras ocasiones, triste pero tranquila al mismo tiempo. Con esa tristeza que produce la perdida de algo bello y la tranquilidad que se siente después del vértigo, por que fue eso, una etapa de constante vértigo.

Ahora desde la perpestiva del tiempo, cuando le recuerdo, no puedo evitar que una sonrisa aflore a mi rostro. Le sigo queriendo como se quiere a quien, de alguna manera me descubrió para la vida, a conocerme y enfrentarme a mi propio yo.
Al fin puedo entender por que ocurrió cuanto ocurrió.











jueves, 11 de septiembre de 2008

Que aburrimiento....
Menos mal que muy pronto comienza la cotidianidad del nuevo curso escolar, al menos en estos primeros días de novedades se anima un poco el cotarro.
Y yo...que voy a hacer?
Gimnasio o cursillo de yoga? o tal vez las dos cosas, ya veré. La cuestión es "mover el esqueleto".
Por lo pronto decidí descargarme de una obligación que adquirí de forma altruista, seguiré colaborando pero solo como compromiso personal, ya estoy harta de responsabilidades que solo me aportan quebraderos de cabeza...
No tengo la mas mínima idea de lo que voy a hacer en los próximos días, o meses. Es tal el desencanto que nada llama mi atención lo suficiente como para prestarle una poca, ni siquiera escribir me satisface. Creo que me he vuelto de un exigente.....

jueves, 4 de septiembre de 2008

No deja de sorprenderme la facilidad que tienen algunas personas para dedicar sin pudor algunas palabras .
Debe ser que yo las sobre valoro, o tal vez quien las ofrece gratuitamente las menosprecia, por que de otra manera no lo entiendo.
Palabras....
Simples frases que tienen la fuerza de hacer subir al cielo, o a la contra sujetar los pies a la tierra. Enrevesada sucesión de letras que siempre buscan un propósito, el de hacerse entender, unas veces de forma clara y literal, y otras, las mas inquietantes, guardan entre sus lineas mensajes que solo la complicidad del receptor es capaz de resolver.
Ese juego de decir sin hablar, de dar por hecho que el otr@ va a entender justo lo que queremos que entienda es un tremendo error, peligroso y dado a confusiones.
Me pregunto que ocurriría si yo le dijese a alguien....."Deseo verte". Una simple frase que encierra la interpretación que le dará quien la reciba, una frase limpia que tiene tantos matices como tonos de voz se le quieran adjudicar.
-Deseo verte...........para saber de ti.
-Deseo verte..........para tomar un café.
-Deseo verte..........para darte un abrazo
-Deseo verte..........para hacer el amor.
-Deseo verte..........para volverte loco.
-Deseo verte..........para volverme loca.
-Deseo verte..........por que lo deseo, sin mas.

Ahora que lo pienso,,si,,,deseo verte, deseo verte tanto que no me acostumbro a no saber de ti. Deseo verte, mucho, muchisimo, pero sobre todos mis deseos, deseo verte feliz.

lunes, 1 de septiembre de 2008

Estoy cansada, muy cansada.
Tengo a una persona en la cabeza y ya no se como arrancarla de ella. No se que quiero de el , no se que espero, no se como hacer para olvidarme de una puñetera vez que existe, no se por que sigue ahí, no se por que sigo aquí, no se por que aparece o por que le busco,,no lo se.
Ojala mi deseo no fuese tan fuerte como mis miedos, ojala supiese vestirme de frivolidad para proponerle una aventura, ojala no me sintiera tan absolutamente débil emocionalmente como para correr el riesgo de volver a caer otra vez en el mas espantoso de los ridículos.
Son demasiados ojalas.....Si al menos fuese capaz de odiarle, pero ¿por que? no tengo ningún motivo para hacerlo y además nunca he sabido odiar a nadie que no fuese a mi misma.
He intentado olvidarme desesperadamente de mis errores con el, sin duda el mayor de ellos fue no cometer el ultimo, el definitivo. Temí unas consecuencias y no conté con estas otras.
Ojala, otro ojala, hubiese cometido cuando he tenido la oportunidad, el error de decirle lo que pasa por mi cabeza, el deseo casi primitivo que siento, las ganas que me arden dentro cuando pienso, cuando recuerdo, las locuras que imagino.
De todo eso estoy tan cansada, ya necesito desesperadamente descansar...